• El cuello: están situados verticalmente en los laterales.
• Las ingles y axilas: los cambios aquí son más fáciles de detectar.
• La mandíbula: por debajo y a ambos lados.
• Detrás de los oídos y en la nuca: también fáciles de comprobar.
Los ganglios en cuello, ingles y axilas están unidos en cadena. El primer ganglio de cada cadena es el llamado “centinela”. Es de destacar la importancia de este ganglio, ya que es el primer indicador de si algo va mal en nuestra salud.
Los ganglios inflamados pueden persistir durante bastante tiempo. Es conveniente que su médico de familia le haga una exploración para estar seguros de que es un ganglio y no la glándula parótida, que se encuentra en esta misma zona. En todo caso conviene vigilar su evolución, realizando una biopsia si hay dudas de su naturaleza.